jueves, 15 de diciembre de 2011

Suspiros de invierno

Las palabras de una mirada son inescrutables como el amor prematuro.
Sintiendo cada vacío con la fuerza de la atolondrada palpitación.
Has quemado mi cañaveral afligido con tu renaciente vendaval.
Corazón risueño envuelto en un prado de realidad muda.
Vísteme con las hojas de los árboles tétricos de la incógnita.
Sumérgete junto a mí bajo las lagunas del romanticismo fantástico.
Sigue mis huellas hasta el reino de las maravillas.
Alienta la ilusión de una inmadurez plagada de raciocinio.
Es el tacto de las quimeras que guían nuestros destinos.
Aquellos desalientos de sentimientos caducifolios.
Tropezando contra el arduo azar y marchitando lo verídico.
Esencias santificadas en tu nombre.
Lágrimas de sol descendiendo como espíritus errantes.
Evidencia desconfiada y llantos de tormenta.
Cohesiones inocuas de emociones salvajes.

(Escrito y creado por Juan Antonio Acedo Díaz)